Mi estancia en La Mirabelle-Casteil Country House fue simplemente inolvidable. Me encantó la calidez y la atención de Olga y Richard, quienes se aseguraron de cuidar cada detalle para hacer mi estancia muy agradable. Las habitaciones eran amplias, limpias y muy cómodas, con vistas espectaculares a la montaña. Además, el jardín del hotel era simplemente encantador, un lugar perfecto para relajarse y disfrutar del hermoso paisaje. El desayuno era delicioso, con croissants recién hechos que no podía resistir. Sin duda, recomendaría este hotel a cualquiera que busque una experiencia especial en el corazón del Canigou.

La Mirabelle-Casteil es un lugar muy especial, con una ubicación privilegiada en medio de las montañas. Olga y Richard son unos anfitriones excepcionales que cuidan todos los detalles para que tu estancia sea deliciosa. El hotel y las habitaciones están cuidadosamente decorados para que puedas disfrutar del campo sin perder el confort. Además, el desayuno es inmejorable, con croissants recién hechos. destacar que Olga y Richard son los chefs del restaurante del hotel, donde sirven una comida espectacular. Sin duda, un lugar para disfrutar y descansar.

Nada, ninguna queja. 😊

Increíble! Olga y Richard son anfitriones excepcionales, cuidando cada detalle para hacer de tu estancia una delicia. El lugar es privilegiado, en medio de las montañas, las habitaciones y el jardín están decorados con mucho gusto y el desayuno es inmejorable, con croissants recién hechos. Además, la señal wifi es muy buena, el acceso es fácil y el sitio es perfecto para descansar, con un jardín precioso donde disfrutar del paisaje. ¡Volvería sin dudarlo!

El desayuno era delicioso, con una gran variedad de opciones para elegir. La ubicación del hotel era perfecta, con vistas impresionantes a las montañas y fácil acceso a todos los lugares de interés de la zona. disfruté de la tranquilidad y la paz que se sentían en el hotel.

La recepción del hotel era un poco lenta y desorganizada, lo cual fue un poco molesto. Además, las habitaciones eran un poco pequeñas y parecían necesitar una renovación.

Nos encantó nuestra habitación en La Mirabelle-Casteil Country House! Tenía un baño privado con todo lo necesario, incluyendo un secador de pelo. Disfrutamos de las vistas al jardín y de la comodidad que brindaba el patio con vistas a las montañas. Además, teníamos wifi gratis y una caja de seguridad para guardar nuestras pertenencias. Fue simplemente perfecto para nosotros.

La única cosa que no nos gustó tanto fue que la habitación tenía un televisor. En nuestra opinión, preferimos disfrutar de las vistas y la tranquilidad en lugar de ver la televisión.

La Mirabelle es un lugar muy especial para descansar y disfrutar de los hermosos paisajes del Canigó. Olga y Richard son encantadores y se preocupan por cada detalle para garantizar una estancia agradable. Además, son los chefs del restaurante del hotel, donde se sirven comidas espectaculares. Las habitaciones son amplias, limpias y cuentan con todas las comodidades necesarias. El lugar es tranquilo y el jardín es precioso, ideal para relajarse con una taza de té o disfrutar de un delicioso vino.

Olga y Richard son anfitriones excepcionales que cuidan todos los detalles. El lugar es privilegiado en medio de las montañas. Las habitaciones y el jardín están cuidadosamente decorados. El desayuno es inmejorable con croissants recién hechos. El wifi es excelente en todo el hotel. El acceso al pueblo y al hotel es muy fácil. Todo invita al descanso y está decorado con mucho gusto. Volveré seguro.

Me sentí seguro, no tengo ninguna queja.

Qué escapada tan maravillosa! Nos encantó cada momento de nuestra estancia. Los anfitriones fueron amables y atentos, nos hicieron sentir como en casa. La ubicación es perfecta para disfrutar de la naturaleza, con impresionantes vistas a las montañas. Además, las habitaciones estaban impecables y muy cómodas. Nos encantó despertarnos y disfrutar de un rico desayuno en el jardín. ¡Una experiencia inolvidable!

No hay nada negativo que mencionar. Todo estuvo perfecto y superó nuestras expectativas.

El sitio era espectacular, tranquilo y confortable. Los propietarios eran un encanto y siempre estaban dispuestos a ayudarnos en todo lo que necesitábamos. Estaba cerca de muchos lugares interesantes y perfecto para nuestras rutas de montaña. Además, las vistas al Canigó eran increíbles. La comida era deliciosa, tanto la cena como el desayuno. ¡Ya estamos deseando volver!

Podría haber tenido más opciones de diversión para jóvenes fiesteros, ¡pero eso no arruinó nuestra estancia en absoluto!

Un sitio espectacular con vistas increíbles de montaña, tranquilo y confortable. Los propietarios son un encanto, muy atentos y dispuestos a ayudar en todo lo que necesites. Además, está cerca de muchos sitios de interés y es perfecto para hacer rutas de montaña. La comida es muy buena y el desayuno es excelente, con croissant recién hechos. Sin duda volveremos a este lugar tan especial.

Olga y Richard como anfitriones excepcionales

Lugar privilegiado en medio de las montañas. Habitaciones y jardín cuidadosamente decorados.Desayuno inmejorable con croissant recién hechos

Absolutamente nada.

La ubicación es increíble, rodeada de montañas y con unas vistas impresionantes. Las habitaciones son acogedoras y el baño está equipado con todo lo necesario. El servicio es amable y atento, asegurándose de que tu estancia sea agradable. Además, el desayuno es delicioso, con croissants recién hechos y una variedad de opciones para elegir.

Los precios son un poco altos en comparación con otros lugares de la zona.

El desayuno muy completo, la atención de Richard fantástico, las cenas espectaculares, señal wifi excelente en todo el hotel.

Estaba como en casa, no tengo ninguna queja.